¿Qué errores se suelen cometer al alquilar un trastero?

En primer lugar, no todos los objetos se pueden guardar en un trastero. El desconocimiento de esto, puede poner en peligro tanto su trastero como al resto de las instalaciones. Como ya intuirá, los objetos de naturaleza explosiva o radiactiva están totalmente prohibidos, hasta aquí bien. Siguiendo con la lista, tampoco debemos guardar productos corrosivos o altamente inflamables, ya que podrían originar un accidente de grandes dimensiones en las instalaciones, con tan sólo un mechero o unas cerillas. También dentro de este apartado, se incluyen productos perecederos, ya que puede atraer a insectos o pequeños animales, que pueden poner en riesgo el estado de sus objetos si se produce una plaga.  Si tiene alguna duda sobre algunos elementos, es mejor que pregunte a la empresa, para cerciorarnos de que no creemos un peligro inconscientemente.

Otro de los errores frecuentes que se cometen a la hora de alquilar un trastero o guardamuebles es el de elegir el espacio justo. Ya sabemos qué objetos vamos a guardar allí y nos imaginamos el trastero en nuestra mente y todo colocado como un Tetris. Eso es la teoría está muy bien, pero en la práctica no. Usando un paralelismo, es igual que cuando compramos una prenda de ropa y elegimos la misma talla de siempre. Si no lo tenemos en cuenta, que los fabricantes tienen un tallaje distinto o si engordamos o adelgazamos en un transcurso breve de tiempo.

Con un trastero, la situación es la misma. Tenemos que tener en cuenta que hay que dejar un espacio libre para poder moverse y realizar las tareas de almacenamiento de una forma más rápida y cómoda. Es por esto, por lo que se recomienda alquilar un trastero de tamaño algo más grande, teniendo de base las dimensiones que ocuparán los objetos que se guarden. En el caso de que disminuyamos el tamaño base o de que nos sobre demasiado espacio, tenemos la posibilidad de cambiar las dimensiones del trastero, por lo que no habrá ningún tipo de problema.

Otro de los errores frecuentes, es la dejadez de los enseres guardados en los trasteros. Esto ocurre, cuando no necesitamos cotidianamente nada de lo que hay guardado, por lo que no acudimos al trastero en un gran espacio de tiempo. Aunque no se necesite ningún objeto, es recomendable revisar de forma periódica el estado de lo guardado, para que después no nos llevemos una sorpresa cuando volvamos a buscarlo. De esta forma, nos aseguramos que está todo tal y como lo dejamos, y que no hay problemas de humedad, suciedad o plagas de insectos o pequeños animales. Esto a priori puede parecer baladí, pero no lo es, ya que son muchos los casos que nos han llegado sobre estas situaciones, llegando en un punto donde ya no se podía recuperar ningún objeto.